Si bien, el mal momento no solo del equipo rossonero
sino, de todo el fútbol italiano en general es notable, y el ejemplo más claro
es la realidad de Parma, este equipo se ve cada vez peor... es duro decir que este Milan da pena verle
jugar. El otro día, en el partido contra Chievo, se podía ver que el factor: “Anímico”,
era parte fundamental sobre el juego, y eso tiene que ver con el con el hombre que
les tiene que motivar, es decir, el director técnico, la cabeza de este club,
por lo visto Inzagui no fue la mejor opción para el banquillo, los jugadores están
faltos de ideas, de ganas, se nota que salen al campo y lo único que tienen en
mente es que finalice el partido… incluso, pareciera que jugar fuera una carga
para ellos.
El DT italiano, tuvo muy buenas incorporaciones en el
mercado invernal, y debo destacar el buen ojo que tuvo la directiva, que
sabemos que es la principal culpable del momento por el cual se atraviesa,
pero, esta vez trajeron varios refuerzos que podrían aunque sea resolver. Este problema,
no solo es del técnico, también es una cuestión
del planten en general. Estoy seguro que por lo menos 10 o 15 jugadores de esta
plantilla no deberían estar en el equipo, se habla de que la próxima temporada
va a ver una “REVOLUCIÓN”, esperemos que así sea porque si no el nuevo estadio
se va a estrenar jugando en la Serie B.
Estos son los jugadores que a decisión propia deben
seguir en el club, los que no estén es porque deberían dejarlo:
Diego López, Paletta, De Sciglio, Zapata, Antonelli,
Alex, De Jong, Montolivo, Poli, Bonaventura, Suso, Destro, Ménez, Mastour, El
Shaarawy.
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