Mientras
los demás clubes europeos se destacan en sus pretemporadas y son protagonistas
del mercado de pases, el Milán sigue sin levantar, la verdad un equipo sin
ideas, sin ganas y lamentablemente muy desordenado. El día de ayer jugo su
segundo partido por la Copa Guinness, que se celebra en Estados
Unidos y donde juegan los clubes más importantes de Europa, incluyendo al Real
Madrid que venció al Chelsea en la edición pasada y se consagro campeón.
En el primer tiempo me atrevería
a decir que los primeros 10 minutos fueron de mucho toque y buen ritmo, el Milán
daba señales de buenas cosas, luego un desastre total el portero Agazzi falla
en su palo y llego el primero de Jovetic, la ventaja no tardo en aumentar y en
23 minutos con un gran Jesús Navas, el conjunto ciudadano ya ganaba por tres,
se veía complemente negra la noche rossonera y Muntari al final del primer
tiempo descontó para darle una esperanza al equipo.
Gracias a una lluvia el segundo
tiempo, tardo en iniciar y los italiano para el segundo tiempo, realizaron varios
cambios incluyendo a Mario Balotelli que para ser sincero lo más entretenido
que tuvo fue la selfie con el aficionado, sin mucho por hacer el City marco el
quinto y el partido se terminó de cerrar, lo más curioso fue que Inzaghi dejara
tanto tiempo en cancha a Niang que no es ni la mitad de lo que era en el primer
semestre de 2013, teniendo en el banquillo al talentoso joven Mastour de 16
años que ya está dando de qué hablar.
El mercado aun sigue, creo
que este equipo tiene para traer algún jugador que marque la diferencia y de
otras alternativas, la verdad que se ve muy triste hasta ahora ver que a la fecha
solo llegaron Alex y Menez, tomando en cuenta que llegaron al club porque eran
las sobras de un PSG lleno de estrellas. Si eso no pasa, entonces es muy
probable que tengamos una temporada muy parecida a la que paso, espero que por
el bien del club se haga una buena limpieza y tengamos un proyecto digno para
volver a soñar con títulos.
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